jueves, 14 de agosto de 2008

ABRIENDO PUERTAS

Abro esta puerta, entornada por tanto tiempo, esperando que simplemente la empujase y me encuentro un mundo entero por descubrir. Pero ¿no estaba todo visto, todo hecho, todo dicho, todo aprendido, todo acabado? –No-, me responde una voz desde la penumbra, -todo empieza aquí-. Un fuego comienza a subirme por la garganta, es de color verde esperanza y en el momento en que creía que estaba cruzando el umbral de la derrota, cuando iba a postrarme de rodillas para recibir el último golpe de muerte, todo se vuelve un arco iris de luz cegadora. Ya lo estoy sintiendo, ya no hay tiempo para el dolor, ya no vuelta atrás.

La voz me susurra tanta belleza, palabras para las que ya no me creía merecedora, por un momento titubeo y doy un paso para atrás, el miedo a la penumbra es más fuerte que yo, pero la voz me envuelve y seduce a mi corazón que empuja de mí hacia delante como imantado por ella.


-¿Qué quieres de mi?-, le pregunto, y ella comienza a entonar –despertarte a la vida, bañarte en el arroyo de tus sueños, pasear por las nubes junto a ti, cogerte de la mano para crecer a tu lado, bailar acompasada contigo-. Desconfío e intento dar otro paso para atrás, pero ya no hay camino detrás de mí, se ha borrado con mi paso hacia delante. Siento que la voz está cada vez más cerca y cada vez la reconozco más familiar, posee tonos míos, una musicalidad hermana de mi propia voz, la siento segura. De repente, noto un suave aliento erizando la piel de mi cuello. La voz ahora son labios que besan mi nuca. Creo que voy a desmayarme, pero no lo hago, ya no hay miedo, sólo deseo de fundirme con las sensaciones que me asaltan como un mar embravecido.
Me agarro a las manos de la voz y sus brazos me recogen pequeña, comenzamos a bailar una música de vida, la más hermosa que nunca escuché. Los sones nos abrazan y nos cuentan historias de amor, el tiempo se lleva mi mente muy lejos, donde pueda volar, y el ritmo de la música es la única prueba que me recuerda que el tiempo aún existe.
Abro los ojos con fuerza y la luz comienza a entrar, cada vez más intensa, un azul infinito empieza a abrirse paso detrás de la penumbra, todo es azul.

El verde esperanza se hace más fuerte también y ahora se concentra completamente en sus ojos que lo iluminan todo como dos esmeraldas, como la hierba y la fruta fresca, como la albahaca y la menta de su boca, como la tierra verde donde crecí, como las ramas del olmo donde tantas veces me protegí, como la primavera de la que siempre me enamoré, como el verde que te quiero verde que tantas veces releí en ese romance sonámbulo, suspirando por que alguien me sacase de mi sueño de mar amarga, mientras esperaba en los barandales de la luna gitana, preguntando ¿pero quién vendrá? ¿y por dónde...?

Y ahora abro esa puerta y encuentro el verde que te quiero verde que me lleva de la mano al barco sobre la mar y al caballo en la montaña y suena la música...
Sigamos bailando...

3 comentarios:

loose dijo...

A eso le llamo yo SENTIR LA VIDA, encontrar tu esencia, conectar con tu YO más profundo, desbloquear tus emociones y dejar que bailen con tu parte racional.

Dar pasos hacia delante y clavar la mirada en el azul de esa puerta que tantas cosas te susurrarán.

Date permiso para vivir la experiencia de cruzar ese umbral y ya me contarás.

Ese AMOR incondicional que te espera LIBRE ahí detrás. Ese amor que significa que vas encontrando tu verdadera realidad. Adelante, no mires hacia atrás, y si lo haces, mira esperando ver el color verde esperanza que tanta fuerza te dará.

Un abrazo. Y si ves una mano que asoma, agárrate a ella y no la sueltes jamás, porque es la mano amiga que te llevará a la LIBERTAD.

el piano huérfano dijo...

Abre nuevas puertas discubre nuevo mundo, y cierra las otra con las buenos recuerdos que dejan, deja que funccione el hechizo.

Te mereces todos los susurros de amor y belleza porque esa eres tu, aomr y belleza, el miedo te protege guardalo como tu mejor amigo, nos avisa, pero no dejes que te frene.

Escucha esa voz que en momentos de lucidez tuve que ir al silencio absoluto para oir esa voz, me alegro que te habla y que la escuches y que te empuja...

un futuro maravillos te espera un mundo lleno de alegrias, porque a mi también me lo dice una voz.

Eres tan creativa, que forma de escribir , eso es puro talento, que envidia (sana) me das.

cuidate guapa

el piano huérfano dijo...

otra cosa, querida amiga:
Cuando abres la nueva puerta entra con el píe derecho y asegurate que has cerrado bien la otra puerta.

suerte

te abrazo